Diario vivir

A fé, que las cosas no me han resultado como quería. He elaborado dos artículos para publicar pero los he perdido, me falta aprender más y estoy dedicado a estudiar la manera como se deben elaborar los blogs, se que tropezando aprendemos. Pido excusas a mis lectores pero espero salir pronto del atolladero. Creo que la falla está que no he guardado los borradores. Estoy organizando mi tiempo para poder cumplir una meta que me he propuesto: mantener actualizados tanto los microbloggings como los blogs. Los medios sociales me atraen demasiado para no estar experimentando a diario con ellos. Hace veinte años ni soñaba que podíamos llegar a interactuar de esa manera con los demás. Tenía que estar enamorado para colocar un telegrama o enviar una carta, o también usar este medio como hombre de negocios por decirlo de otra manera. El teléfono también tenia sus restricciones como pedir a la telefonista que nos pusiera con un número cuando era para larga distancia, con el inconveniente que estábamos sujetos al turno. Los tiempos han cambiado para bien. Con preocupación vemos que los gobiernos comienzan a tomar medidas que pueden restringir el uso de internet como lo conocemos hoy en día. Los internautas tenemos medios para estar atentos y defendernos contra aquellos que quieran coartar la libertad de expresión. Decir lo que quiero es un derecho fundamental que no debe ser suprimido. Los derechos de propiedad intelectual deben respetarse pero no deben ser eternos. Los gustos que tenemos por las canciones, las películas, los videos, los libros, etc. son por decirlo de alguna manera fugaces. Dentro de diez años cualquier película o canción están tan olvidadas como lo puede ser cualquier ser humano en la tumba, claro está a no ser que sea una persona  excepcional. Lo mismo podría decirse de una obra que haya tenido mucho exito.